Cada surfista establece cual es su relación con el surf y cuánto de importante va a ser en su vida o cuánto va a dejar que ésta se condicione.
Está claro que aquellos que son profesionales y le dedican la vida a la alta competición convierten el surf en su trabajo y su dedicación es exclusiva, sin embargo, para la gran mayoría de los surfers que no compiten, la aspiración también es dedicarle la vida a disfrutar de las olas.
Hay quien vive lejos de la playa, trabaja mucho, hace dinero y viaja todo lo que puede. También hay quien trabaja pero vive cerca de la playa y eso le permite surfear a diario, hay quien trabaja poco y puede dedicar más tiempo a surfear y a estar ahí en los mejores momentos, hay quien dedica parte del año al trabajo para luego tener otra parte de viajar y surfear como hacen muchos miembros del staff de nuestro surfcamp en Asturias. Fórmulas hay miles, el caso es surfear
Todos adaptamos la vida que tenemos o queremos tener al condicionante del surfing y a lo largo del mundo, hay miles de surfistas con maneras muy peculiares de vivir que les permite disfrutar del surf y la felicidad que ello les produce.
En el caso de Fergal Smith su vida transcurre entre su huerto, sus animales y las frías bombas que caen cerca de su casa y en las que se pone morado a tubos enormes. Esa ha sido su elección y tiene pinta de que no ha sido nada mala…