El asunto es viejo, muy viejo en el mundo del surf. El vídeo lo veíamos estos días en nuestro surfhouse albergue en Ribadesella, lo recuperaba el blog ¨Surf 30¨ pues hace ya años que se entrenó en el Surf Film Festival de NY. Es bueno, simpático y ridiculiza bastante la conducta del localismo.
Tenemos un amigo en nuestro surfcamp en Asturias que siempre habla de la ¨movida adolescente¨ en el surf, y no le falta razón. Tampoco creemos que les falte razón a quienes piensan que cuando uno sale de casa debe respetar a la gente de los sitios a los que va.
El localismo en nuestra opinión puede ser ejercido con respeto y con cierto ¨derecho¨ o puede convertirnos en una panda de imbéciles meando farolas a ver quién manda más… Todo depende de cómo se haga.
En Surfcamp Ribadesella estamos habituados a hablar de este tema con muchos de los que nos visitáis, la mayoría de los que venís de zonas sin playa os cuesta el concepto y es normal que cueste. Hay quien jamás lo entenderá, generalmente quien no es local de ninguna playa y se ríe si alguien está hablando y dice ¨mi playa¨. Sin embargo seguro que él para referirse a la zona donde vive también dice ¨mi barrio¨ o ¨mi calle¨, el problema no es la expresión o el concepto, es hasta qué extremo se lleva.
Si estás en el agua, en el lugar donde surfeas casi cada día con tu gente y llega alguien de fuera pues no pasa nada. Si llega alguien de fuera, se pone el primero en el pico y rema la mejor ola de la serie pues como es evidente alguien le va a decir algo… El problema es la forma de decirlo, aunque también depende. Si el que ha hecho eso es alguien al que se le ve que no tiene mucha experiencia vale con explicárselo, si es alguien que surfea bien sabes que está siendo un cara dura y que se está pasando de listo, el tono entonces varía. Es habitual que gente que jamás te dejará a ti hacer eso en el lugar de donde él surfea a diario, luego cuando sale de casa tantee. Por supuesto no va a tantear en un lugar con fama de locales agresivos, pero en los lugares donde la gente en el agua es bastante educada va y prueba. Y oye, si resulta que nadie tiene ganas de ponerse a discutir cuando te das cuenta el tío al que nadie conoce es el que siempre tiene la preferencia y se coge las mejores olas, y le va a seguir echando cara hasta que alguien le ponga claras las cosas.
A la mayoría de los surfers nos parece vergonzoso echar a la gente del aparcamiento, prohibir entrar al agua u hostigar a quien no está buitreando olas sólo para hacer de ¨tu playa¨ un lugar hostil y donde la gente se piense mucho si ir. Sin embargo todos sabemos que cierto orden es necesario para la buena seguridad y el buen disfrute, y que muchas veces la ausencia de alguien con ganas de recordar ese orden acaba provocando un caos de baño.
También está quien llega a una playa donde no conoce, se encuentra contigo y tantea a ver si tú eres de fuera y empieza a cogerse todas las buenas, por muy tranquilo que quieras estar te obliga a decirle algo si no quieres que te chulee todo el baño. Gente hay para todo, hay incluso pandillas que van a playas y amenazan a todo el mundo para surfear ellos solos, pero bueno, esos ya son delincuentes de mierda a los que por desgracia Hollywood hasta les ha hecho un documental. La verdad es que la mayoría de los miembros de nuestro surfhouse albergue en Ribadesella viajamos mucho, surfeamos en muchos lugares del mundo y hemos visto de todo. Cosas entendibles y otras no, locales como cabras que son un peligro y se matan hasta con una merluza si les pasa cerca y foráneos con muchísima cara dura…
El tema como siempre explicamos en nuestro surfcamp en Asturias es complejo, pero porque nosotros lo hacemos complejo y porque el surf es un deporte egoísta en el que las olas buenas son las que son y no siempre hay para todos aunque todos las queremos… ¨La movida adolescente del surf¨ siempre estará ahí y el egoísmos intrínseco del surfer es algo inevitable. A veces el surf no es tan idílico como parece cuando lo vives dentro del agua.
En cualquier caso Ribadesella es un lugar donde las personas que llevan toda la vida surfeando son bastante amables y educadas, donde si no te pasas de listo no deberías tener ningún problema y donde pocas veces hay broncas en el agua, aunque a veces la ausencia de bronca signifique menos orden y haga el baño más complicado…
