Después de más de un año de gestión del Albergue Roberto Frassinelli y después de escuchar muchas tonterías, insinuaciones insidiosas y comentarios de gente muy desinformada, vamos a responder a unas cuantas cosas. Entre otras, a esta divertida pregunta que alguien ha hecho en las redes con bastante mala intención ¿Qué fue del Albergue Roberto Frassinelli?
El Albergue Juvenil Roberto Frassinelli es una concesión pública por la que se otorga una gestión privada, sujeta a ciertas normas, pero repetimos, gestión privada.
El Albergue Juvenil Roberto Frassinelli es como su propio nombre indica un albergue juvenil, no es un albergue de peregrinos, es más, para acceder al concurso se pedían ciertas capacitaciones técnicas en las que quedaba expresamente excluida la gestión de albergues de peregrinos.
Entre las actividades comprometidas por esta empresa para gestionarlo están el fomento del asociacionismo juvenil y las actividades de ocio y tiempo libre juvenil, y dentro de este programa se desarrollan campamentos de adolescentes en julio y de gente joven en agosto, septiembre, semana santa y puente de mayo. Como empresa medianamente exitosa que somos, tenemos la capacidad de llenar esos campamentos, por lo que durante esas fechas está completo. Al igual que en todos los albergues de la red nacional de albergues juveniles donde se organizan campamentos, hay campamentos de muchos tipos y con muchos tipos de actividades, los nuestros tienen como actividad principal el surf, algo bastante lógico por varias razones. Una es que estamos en primera línea de playa, otra que es una actividad con muchísimo atractivo y tirón turístico y la tercera, es que es la actividad en la que es especialista la empresa que lo gestiona. Además de surf, se hacen muchas otras actividades que ofrece la zona y propias de campamentos.
Fuera de las fechas en las que siguiendo nuestro programa de gestión y promoción juvenil se realizan esos campamentos, el albergue está disponible para todo tipo de público, siempre que se tenga carnet de alberguista (formamos parte de la REAJ) y siempre que obviamente haya plazas. El edificio no sólo cuelga el cartel de completo en las fechas de los campamentos que nosotros organizamos, lo hace en muchas más fechas pues en nuestro trabajo de promoción del turismo joven atraemos a multitud de viajes de estudios, asociaciones, grupos deportivos o empresas que gestionan campamentos de muchos tipos, desde en los que sólo se habla inglés, hasta campamentos musicales.
Dicho esto vamos a dar respuesta a algunos de esos mantras que sin tener ni idea, alguna gente bastante mal intencionada repite sin parar… Es curioso ver la de llamadas y consultas que recibimos en las que la intención no parece ser reservar una plaza si no acusarnos de no tener el albergue disponible no se sabe muy bien para qué.
¿Tiene que tener el albergue plazas disponibles para peregrinos?
A esto creemos que ya hemos dado respuesta con lo que hemos escrito hasta ahora, pero repetimos, NO es un albergue para peregrinos. Otra cosa es que anteriores gestiones, incapaces de darle a este edificio la vida juvenil para la que fue creado, se dedicaran a vivir del peregrino de paso y cobrarle hasta las sábanas.
¿Tiene que tener siempre plazas disponibles?
Es curioso oir como se repite esa afirmación, es como si el albergue tuviera plazas ilimitadas, si el edificio está lleno, está lleno, y si se quiere hacer una reserva y resulta que lo ha reservado previamente, pongamos un instituto para su viaje de estudios, ¿Cómo hacemos? Y si resulta que quedan cinco plazas, llegan cinco personas, las ocupan y a la media hora llegan otras dos… ¿Qué hacemos? Eso de que hay que tener plazas disponibles no se sabe para qué ni para quien, es la afirmación más ridícula de todas las que hemos oído en estos catorce meses.
Nos sentimos muy orgullosos de poder colgar el cartel de completo durante muchas semanas del año, eso lo que significa, es que lo estamos gestionando bien y estamos haciendo que el edificio y nuestra oferta, atraiga a Ribadesella a miles de personas jóvenes.
¿El albergue es sólo para surfistas?
Bueno, pues también está respondido creemos, pero vamos a aclarar algo más. Durante las fechas de nuestros campamentos, es para gente que vienen a hacer un campamento en el que una de sus actividades principales es el surf, la mayoría ni son surfistas ni nunca lo serán, pero esa semana disfrutan probándolo, de igual forma que bajan el Sella en canoa y nadie dice que son piragüistas. Además, como ya lo fue muchos años anteriores con diferentes gestiones, es un lugar donde se ubica una escuela de surf. Surfcamp Ribadesella gestiona varios alojamientos, negocios de hostelería, una escuela de surf y una red con varias webcams de playa. Su escuela de surf, tiene entre una de sus sedes, el Albergue Roberto Frassinelli. Eso no tiene nada que ver con la maliciosa afirmación que alguna gente quiere repetir de que sólo te puedes alojar si eres surfista. Como hemos dicho, aquí se alojan todo tipo de personas durante todo el año y sólo un pequeño porcentaje son surfistas.
Respondidas estas preguntas concluiremos con la siguiente reflexión.
Durante treinta años a nadie pareció preocuparle mucho qué pasaba con el Albergue Roberto Frassinelli, sin embargo parece que desde que esta empresa demostró y el Tribunal Superior de Justicia de Asturias sentenció que el concejal de Ribadesella que había ganado la concesión, lo había hecho irregularmente, hay mucha gente preocupada de qué se hace y qué no se hace en el edificio.
Pues bien, un edificio que durante décadas ha estado medio vacío, medio podrido por dentro, del que sólo podía disfrutar una minoría dispuesta a dormir en un lugar lúgubre, donde la mayoría de los grupos venían una vez y no volvían, ahora se ha convertido en un lugar lleno de vida. Un edificio que daba empleo a tres, cuatro o cinco personas, a día de hoy, se lo está dando a veintiuna personas contratadas a jornada completa, la mayoría menores de treinta años y todos menores de cuarenta. La realidad es que ese edificio medio inutilizado, hoy lo hemos convertido en uno de los mayores centros de atracción turística de la zona, hemos abierto su maravillosa terraza para que todo el mundo pueda disfrutar de ella y sobre todo le hemos hecho la mayor reforma desde que se convirtió en albergue. Parece que todo esto hay a quien en vez de parecerle bueno, le molesta.
Dentro de nuestro programa como albergue juvenil, también está la formación vinculada a la empleabilidad de personas jóvenes, por lo que recibimos a chic@s de prácticas de diferentes especialidades relacionadas con el turismo. Fomentamos la creatividad joven con la oferta de un puesto gratuito en nuestras oficinas para un joven empresari@ que necesite un lugar desde donde desarrollar su negocio. Pasado el verano, también ofertaremos un espacio para grupos musicales de jóvenes que necesiten un lugar donde ensayar, zonas de reunión para colectivos y asociaciones y muchísimas otras cosas que poco a poco y tras muchos meses de obra, iremos ofertando para acabar siendo el mejor albergue juvenil de España que es nuestro objetivo final. Todas estas cosas se podrán ir viendo la web, que aunque hace un tiempo que ya está operativa www.alberguejuvenilribadesella.com aún no la hemos promocionado, pues estamos acabando el trabajo de vídeo y fotografía con el que queremos presentar todo.
Estamos muy orgullosos de lo que estamos consiguiendo, no pretendemos que nadie nos de las gracias por que para hacer que todo quedara perfecto, se haya invertido más del doble de lo comprometido en el concurso, no pretendemos que nadie nos de las gracias por darle vida al edificio, ni por ser una de las empresas que más turismo atrae a la zona, nos vale con que nos dejen seguir trabajado tranquilamente.
Acabamos este artículo invitando a todo el mundo a disfrutar de un edificio que antes era inaccesible para la mayoría, y donde hoy, cualquier riosellano o visitante, se puede sentar en su terraza mirando al mar, utilizar el wifi gratuito y degustar nuestra rica carta, pues la gastronomía y la formación de jóvenes cocineros son otro pilar sobre el que se basa la nueva gestión privada del Albergue Roberto Frassinelli.
